Jordi Évole se desplaza, junto al equipo de ‘Salvados’, a Göteborg (en Suecia) para acompañar durante una jornada a David Pallarès y Emma Carlson, una pareja con dos hijos de 2 y 6 años. En diez años, Suecia ha logrado revertir la baja natalidad gracias a las medidas de conciliación familiar impulsadas. Entre éstas, se encuentra el fomento de la paridad, las guarderías públicas con plazas suficientes para todos los niños, la flexibilidad de horarios, las ayudas y facilidades para cuidar de los hijos pequeños cuando se encuentran enfermos o las 68 semanas de baja por el nacimiento de un hijo. Todas ellas son medidas que a David Pallarès le gusta resumir en una sola palabra, “libertad”.

Sin embargo, todas estas medidas le plantean una pregunta a Jordi Évole. ¿Quién paga todas estas ayudas para las familias? Como David explica, todo ello queda sustentado por los impuestos, que además de ser más altos que en España, se gestiona de forma más eficaz, al carecer de problemas como la corrupción.

Ya en España, la catedrática de Psicología Social y especialista en conciliación Sara Berbel, resume la situación de la conciliación familiar. Además de carecer de paridad a la hora de hacerse cargo de los hijos, las largas jornadas laborales constituyen uno de los principales problemas a solucionar.  En España, el 50% de los abuelos son los responsables del cuidado de sus nietos.

Jordi Évole también acude al Congreso de los Diputados para hablar con dos parlamentarias, Lourdes Ciuró (CiU) y Ascensión de las Heras (Izquierda Plural). Ambas han debatido, durante tres años, sobre conciliación a través de una subcomisión parlamentaria. Sin embargo, su trabajo no llegó a debatirse en el Congreso. Si en algo coinciden es que “la conciliación no es una prioridad política en España”.