Tras la propuesta de Ana, Mateo acepta regresar a las Galerías Velvet con unas estrictas condiciones que Enzo Cafiero acaba aceptando, a pesar de las reticencias de Marco. El magnate italiano propone a Ana incrementar los beneficios de su proyecto prêt-à-porter eliminando las viviendas en las que residen los empleados. Sin embargo, Ana se niega rotundamente.

Adele (Paula Prendes) es una misteriosa mujer que llega a las galerías desde Nueva York con la intención de ver las obras de Philippe Ray, mostrando un especial interés por el famoso vestido rojo. Cuando Cristina se lo acerca, Ana se emociona y se marcha del taller. Es, entonces, cuando Adele le cuenta a Cristina que trabaja para Alberto Márquez. ¡Está vivo!

Por otro lado, Cristina logra dar una alegría a Raúl de la Riva tras conseguir que Humberto (Aitor Luna) se convierta en el rostro de su nueva colección. Es evidente que ambos se sienten atraídos el uno por el otro.

Emilio y Blanca acuden al velatorio de Doña Aurorita, donde se encuentran con su hermana Petra (Concha Velasco), un antiguo amor de Emilio. ¿Volverán a saltar las chispas entre ellos?

Por su parte, Rita descubre que tiene cáncer de pecho. Sin embargo, se niega a compartir la noticia con su familia y amigos. Marco acaba de elegir a Pedro como su asistente personal y Rita no quiere amargarle su momento de alegría. Sin embargo, lo que ambos ignoran es que se trata de una estratagema de Enrique y Marco para derrocar a Ana.

Cuando Patricia acude al médico, éste le da una extraordinaria noticia: ¡está embarazada! Sin embargo, hace mucho tiempo que no tiene relaciones con Valentín, por lo que el padre del niño no es otro que Enrique. Para ocultarlo, decide hacer de tripas corazón y confesar a su marido su deseo de ser madre.

Finalmente, Jonás se convierte en el nuevo sastre de Raúl de la Riva tras superar las pruebas necesarias.