En las ciudades chinas más afectadas por la enfermedad se controla casa por casa la temperatura y condiciones de los ciudadanos en cuarentena. Los contagios han decrecido y el 80% de los casos se encuentran en estado leve.

No obstante, la Organización Mundial de la Salud cree que no hay que bajar la guardia ante el Covid-19 hasta que la situación vuelva a la normalidad. En Camboya, los cinco españoles que viajaban en el crucero 'MS Westerdam' continúan retenidos tras detectarse algún caso en el interior.

El Gobierno chino también ha reaccionado al descontento social con pantallas gigantes en las ciudades animando a la población en una propaganda que tiene como objetivo evitar una crisis social tras la oleada de críticas.