Reino Unido, Italia y España eran "los últimos de la clase" y Alemania ha sido catalogado como el ejemplo a seguir en Europa por su gestión de la crisis sanitaria.

"En Alemania hay una capacidad de unidades de cuidados intensivos importante, una confianza en el Gobierno importante y de por sí hay un distanciamiento social más grande que en España", asegura Muñoz-Fontela.

La situación allí es diferente porque se trata de un estado federal y hay territorios que han actuado antes que otros: "en Alemania las normas se cumplen a rajatabla".

La preocupación que muestran los ciudadanos de los diferentes países también influye en el desarrollo de los acontecimientos, porque tiene como consecuencia un mayor o menor cumplimiento de las medidas de confinamiento.