"No hemos llegado a bajar a las cifras del verano y nos hemos quedado en un suelo muy alto de 200 casos. No hemos llegado a salir del brote de la segunda ola. No podemos vivir con un poco de coronavirus porque hay riesgo de rebrote", ha alertado el microbiólogo.

Como virólogo, pone el foco en la campaña de vacunación más allá del encierro en casa y cree que "tenemos que incrementar la capacidad de secuenciar". "Este año tiene que ser el de las vacunas y no el de los confinamientos", opina.

Con las nuevas variantes de la Covid-19 han aparecido nuevos síntomas como dolores musculares en las manos, afectación en los nervios y atrofias: "uno de los síntomas principales es la pérdida de gusto y olfato, lo que tiene que ver con los nervios y por ello estas afectaciones pueden llegar a otras partes del cuerpo. Seguiremos aprendiendo sobre este coronavirus".