Theresa May ha superado la moción de no confianza en la cámara por 325 votos frente a 306, con un escaso margen pese a los pocos apoyos con los que parecía contar Corbyn.

El líder laborista está soportando también presiones por parte de su propio partido, con diputados que le exigen dar un paso más y plantear la posibilidad de llevar de nuevo la consulta a la ciudadanía.

La celebración de un nuevo referéndum era un escenario difícil de imaginar, pero desde la Unión Europea exigen a Reino Unido que aclare su situación. Europa ha exigido a Londres que presente una estrategia clara.