Verónica Fanego y su pareja sospechan que la primera prueba PCR que les realizaron y en la que él dio positivo era falsa "por cómo sucedió todo" cuando quisieron regresar a España. "Nos dijeron que los resultados estaban bien pero que el informe no estaba listo y tomamos el hidroavión para ir al aeropuerto", ha contado.

Una vez en el aeropuerto, les querían hacer pagar 320 dólares por una prueba cuyos resultado podrían tener a los 20 minutos, pero no era válida para viajar. El responsable del resort que se había comprometido en darles los resultados a tiempo, no les hizo llegar el informe y la espera se hizo insoportable.

Verbalmente les comunicaron que él había dado positivo y no recibieron ningún documento, así que llamaron a España y la embajada reconoce que se produjo una estafa. Se les obligó ir a un hotel mucho peor y se les cobró a un precio tres veces mayor del que aparecía en su página web.