Algunos de los ocupantes fallecían en el acto tras producirse el trágico accidente en el funicular, que conecta el Lago Maggiore con el Monte Mottarone en poco más de un kilómetro de recorrido y unos 20 minutos de trayecto.

Cuando faltaban apenas 300 metros para llegar al destino, la cabina de desplomó a una altura de unos 20 metros y comenzaba a rodar por empinadas laderas hasta que frenaba al chocar contra unos árboles.

El impacto ha sido de tal magnitud, que los equipos de rescate han necesitado más de cuatro horas para liberar los cadáveres. "Esta gente había venido aquí a olvidarse de este terrible período que vivimos y en cambio se encuentran con este destino fatal. Es una desgracia inmensa", lamentaba Marcella Severino, alcaldesa de Stresa.

Los equipos de salvamento han tenido muchos problemas para acceder al lugar en el que se ha producido el accidente que, según las primeras investigaciones, podría haberse dado al partirse el cable que sustentaba el teleférico en la parte más alta del recorrido.