Las consecuencias de la pandemia de la Covid-19 ha llevado a muchos negocios a reinventarse y es el caso del mayor local de ocio nocturno de la capital peruana.

Después de más de 100 días sin poder recibir a sus clientes habituales, los "drag queens" abren "con mucho entusiasmo" el 'Downtown Market'.

Mantener la distancia social en las discotecas es muy complicado y para no tener que despedir a sus empleados, han decidido apostar por un nuevo modelo de negocio.

"Uno tiene que acoplarse a los nuevos retos", asume uno de los 120 trabajadores del negocio. La pista de baile se llena ahora de estantes con alimentos y productos en venta.