La Organización Mundial de la Salud cree que esta semana en Italia se podría aplanar la curva de contagios, pero "todavía los hospitales están saturados", cuenta la doctora.
La nota positiva es que muchos pacientes empiezan a encontrarse mejor y en los próximos días recibirían el alta hospitalaria, con lo que ahí sí se notará la mejoría.
Como el resto de sanitarios y expertos, Iglesias incide en la importancia de quedarse en casa y no tener contactos en los núcleos familiares para no fomentar el contagio.
"Los enfermos que se queden en casa necesitan el saturímetro para controlar el nivel de oxígeno y saber si tienen que ser ingresados", ha aconsejado.