Este tipo de fenómenos dejan de ser habituales porque estos organismos vuelven a flotar y agitarse en las aguas cuando hay ausencia de personas y las precipitaciones también influyen.

Los surfistas ya se sorprendieron en mayo con esta luz, porque nunca la habían visto una tan intensa y lo relacionaron con los efectos del aislamiento por la pandemia del coronavirus.

Las imágenes son de la Bahía de Monterrey y el efecto de la luz azul viene del proceso de oxidación que se da en la noche, mientras durante el día puede presentar colores más rojizos por el proceso de floración.