Álex (Antonio Velázquez) y Carol (Belén Cuesta) son dos hermanos que, cansados de no encontrar un trabajo estable en España, deciden emigrar a Berlín con el objetivo de conseguir unos buenos ahorros con los que regresar más adelante. Sin embargo, su sueño pronto se convierte en pesadilla en la capital europea. A pesar de sus estudios universitarios y su conocimiento de idiomas, en Alemania no dejan de ser emigrantes.

Sin embargo, no están solos en Berlín. Allí vive su tío Marcelino (Ferrán Rañe), casado con Anke (Gillian Apter) y padre de Ulrike (Kimberley Tell). A pesar de que apenas tienen relación con él, saben que regenta un bar español llamado “Pan y vino”, donde Álex y Carol coinciden con otros españoles en situaciones similares a la suya.

En Berlín también vive Salva (Manuel Burque), un viejo amigo de Álex con el que coincidió en el instituto y que  aún conserva como amigo de Facebook. En su muro presume de la buena vida que lleva en Alemania, pero la realidad es bien diferente. Por otro lado se encuentra Adela Llamazares (Silvia Alonso), quien además de trabajar como recepcionista en un hotel, imparte clases de alemán a los españoles que llegan a Berlín.

Entre los matrimonios llegados desde España, se encuentra el formado por Lucas Moreno (Fele Martínez), quien ejerce la dura tarea de ser amo de casa en un país en el que ni siquiera habla el idioma, y Flor Trujillo (Bárbara Santa Cruz), ingeniera industrial con un puestazo de éxito en Berlín. En el extremo opuesto se están Jaime Carrasco (Jorge Bosch) y Chus Soto (Goizalde Núñez), dispuestos a hacer lo que sea en Alemania para evitar el desahucio de su hogar en Madrid.