Por su empeño en detener a los responsables del asalto a su domicilio, su mujer sufrió un terrible ataque que la dejó ciega. Tras el trauma, Fabio dimite y comienza a trabajar como funcionario de prisiones. Frustrado en su nuevo puesto, este antihéroe se ha convertido en un hombre taciturno, callado y distante; pero en el fondo es franco, crudo, visceral y alejado de lo políticamente correcto.

Roberto Enríquez da vida a Fabio, que defiende cualquier causa aunque vaya en contra de sus intereses.

Enríquez alcanzó su máxima popularidad con la superproducción  ‘Hispania, la leyenda’ donde interpretó el papel de Viriato. Proveniente de una familia de mineros, cuando era niño se mudó con su familia de León a Valladolid. Allí, cerca de su casa, había un centro cultural donde tocaba la guitarra y jugaba a baloncesto, pero reconoce que lo mejor que hacía entonces era actuar.

Su formación empieza en la Escuela de Arte Dramático de Valladolid. Posteriormente fue alumno del Laboratorio Teatral de William Layton continuó preparándose en el Estudio Actoral Juan Carlos Corazza y realizó cursos de Interpretación impartidos por Augusto Fernández.

Cabezota e impulsivo; a veces, Roberto se confiesa tan temperamental que luego se arrepiente. También se define “franco, generoso, optimista y buen amigo de mis amigos”. Elige sus papeles en la pantalla -grande y pequeña- y en el escenario, con sumo cuidado. En cine, ha desarrollado una sólida carrera, donde ya es compañero de viaje de la nueva realidad generacional de directores como Daniel Sánchez Arévalo ('AzulOscuroCasiNegro', 'Gordos'). Pero su popularidad comienza en 1994, cuando trabaja en televisión, en la serie ‘Colegio Mayor’.