El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, no lleva muy bien estos carnavales, primeros tras ser elegido. Las críticas que ha recibido por parte de algunas escuelas de samba han sido respondidas difundiendo una vídeo de una actuación callejera, se supone que cerca de su domicilio.

Subidos en una marquesina, realizan una representación llena de gestos obscenos. Bolsonaro lo ha publicado diciendo que es en lo que se han convertido muchas comparsas callejeras: "No me siento cómodo mostrando esto, pero tenemos que exponer la verdad para que la población tenga conocimiento y decida sus prioridades".

Durante el carnaval, Bolsonaro ha recibido numerosas críticas, como es propio de esta fiesta, y por la oposición que tienen entre numerosos grupos sus ideas ultraderechistas.