Muchos se preguntan si Koeman se atreverá a hacer la revolución en el vestuario y qué hará con "las vacas sagradas". En sus declaraciones, el entrenador no quiere "hablar individualmente de los jugadores". "Un jugador con 32 años no está acabado, pero si hay que tomar decisiones, lo haremos. Yo quiero trabajar con gente que quiere dar el máximo", ha declarado.

Hace un año y medio, el discurso era diferente: "A veces hay que cambiar y lo mismo puede pasar en Barcelona. Suárez, Messi, Busquets o Piqué tienen más de 30 años y hay que cambiar la línea media del campo". En esa entrevista elegía entre un jugador de 22 y uno de 30 quedándose con el más joven.

"La clave es que hay que hablar con Messi, preguntarle qué quiere hacer con el Barcelona y hay que recuperar la capacidad de entrenar. El modelo de Messi ya no va a más, no tiene venta y no compite", ha sentenciado en el programa Jorge D'Alessandro.