"Tenía muchas ganas de estar girando por España y estoy muy feliz de estar en el país, con toda la ansiedad de estar compartiendo mi música en la mejor gira de mi vida", ha dicho sobre este tour tan especial con el que ha triunfado ya en Latinoamérica.

El público vibra desde el primer momento con el show cuando arranca "Tacones rojos" y al artista le trae mucha felicidad cuando ve las "emociones que sumamos y generamos". "Les estamos ayudando a crecer a través de la música y a tener momentos que se te quedan para siempre", agradece.

La evolución desde "Mantra" y "Fantasía" hasta "Dharma" ha sido "muy especial": "significa aceptación de la realidad y cuando vives en ese estado estás en el aquí y ahora. Eres parte de este mundo infinito tan especial en el que estamos, que va de lado a lado".

Le encanta ver cómo las personas de todas las edades corean sus canciones, como la que da nombre al disco y que tiene un mensaje tan bonito y entusiasta. ¡Para bailar, para reírnos, para hacerlo y pa' llorar!