El ingrediente más característico es el maíz, que cuenta con más de 42 especies diferentes y constituye la base de la mayoría de comidas típicas del país. La forma más común de utilizar el maíz es en tortillas, que se utilizan para platos como tostadas, quesadillas, tacos, chalupas, gorditas, picaditas y gran variedad de antojitos mexicanos.

El chile es otro de los ingredientes principales presentes en prácticamente todas las comidas mexicanas. Son frutos de sabor picante que suelen utilizarse para la preparación de diferentes salsas o, incluso, comerlos enteros en el caso de los más atrevidos. El chile está formado por ingredientes como la capsicina, que tienen efectos buenos para la salud. Además, existen muchos tipos diferentes de chile. Entre ellos, Chipotle, serrano, piquín, de árbol o habanero, entre otros.

Otros ingredientes muy comunes en la cocina mexicana tradicional son el cilantro, piloncillo, epazote, nopal, chocolate, arroz y cereales.

Debido a la gran diversidad y el tamaño del país, dependiendo de la zona en la que estés encontraras diferentes platos característicos: en Puebla es famoso los chiles en nogada y el mole poblano, además de los tacos al pastor, que son característicos en todo el país. En otras zonas de México destacan las enchiladas, el pozole, elote, cochinita pibil, escamoles, etcétera.

La gastronomía mexicana fue elegida en 2010 como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.