Al colocar un salto en uno de los puntos de nuestro río vemos cómo aumenta el caudal en la primera parte y disminuye al final del ‘tobogan’, lo que puede ocasionar que se acumulen sedimentos.

Si un piragüista desciende por el salto, hay una zona en la que se genera un efecto centrifugadora por las burbujas, lo que ocasionaría que la persona diera vueltas sin poder avanzar y salir de allí.

Con un túnel aumenta el ritmo del río pero se pueden acumular residuos en el interior y para evitarlo se colocan rejillas, que pueden situarse en recto o de manera inclinada y eso influye si una persona o animal choca contra ellas.