El aparato cuenta con diez motores, ocho de ellos periféricos y dos debajo de los pies, con una estructura que aguante muchísimo el calor y tiene un peso de 40 kilos, así que lo difícil también es manejarlo con el mando sumando el peso de Hunter. La primera vez que voló sobre él "daba bastante miedo" y reconoce que con el tiempo se ha ido sintiendo cómodo.

"Me he caído un par de veces por lo menos, pero no pasa nada porque es así. Llevo haciéndolo desde que tenía 9 años y han pasado muchas cosas", ha contado antes de subirse al ‘Skysurfer aircraft'. Han tenido que crear un espacio aéreo propio para no incumplir la normativa y colarse en el de la ciudad, algo que está prohibido y reservado para las aeronaves autorizadas.

Es peligroso y ha sido impresionante ver cómo se preparaba para volar sobre el plató exterior, era algo que Tom Holland no había visto algo igual y ha alucinado con la demostración: "es mi primera vez y ha sido espectacular". ¡Dale play al vídeo al completo para ver lo que ha hecho Hunter en el programa!