Para mentir hay que tener muy buena memoria y Beltrán puede haber dado un paso en falso al recordar cómo se produjo el forcejeo con el arma que disparó a Tito. Aunque el coronel ha intentado vender que ha ayudado con su declaración a Manolita, a Abel le han descuadrado algunos detalles.

La fecha en la que el hijo de su cuñado se fue a Londres, las coincidencias con la muerte de Marisol y la incoherencia en las palabras del militar parecen haber abierto los ojos al padre de Emma. ¿Investigará por su cuenta lo sucedido?

Tito tiene que declarar todavía en el juicio por el presunto intento de homicidio antes de volver a Londres mientras Manolita sigue en prisión viviendo una auténtica pesadilla a la espera de que el juez dicte sentencia. ¿Saldrá la verdad a la luz?