El sacerdote ha llegado justo cuando el hijo de los Gómez golpeaba con fuerza su propia obra, pero le ha costado calmar al joven, que no sabe qué hacer para superar la pérdida de su hijo.

Aunque en la familia están contentos con la libertad de Manolita, no dejan de recibir golpes y el drama es constante. Ahora, parece que la pareja no encuentra consuelo y es difícil para ellos solucionar sus problemas.

"Solo puedo deciros lo mismo que os dije cuando os casé y tenéis que ser los mejores amigos", le ha aconsejado Gorka, que también le ha pedido que insista, que sea constante para lograr recuperar a Emma.