Era una de las semanas más importantes en el calendario de vacunación de la Unión Europea porque por fin llegaba la esperada vacuna de la filial de Johnson & Johnson, pero el entusiasmo se ha visto truncado con la decisión de la farmacéutica.

Este parón preocupa y mucho en Bruselas porque afecta a los objetivos marcados en la campaña de vacunación de los países miembros de la UE, ya que cuenta con recibir hasta 55 millones de dosis hasta finales del mes de junio.

Hay tres vacunas en cartera y a la espera de aprobación: la de Novavax, en proceso de revisión por la Agencia Europea del Medicamento; la del laboratorio alemán Curevac, con el que ya se ha firmado contrato y la de Sanofi.

Con los ocho modelos de vacunas podrían alcanzarse los 3.000 millones de dosis, más de cinco veces la población europea y habría que sumar la rusa, Sputnik V, que la EMA está analizando. El principal problema ahora es la fabricación y producción de las dosis.