Por el momento, solo se sabe que es un niño y que ha pesado tres kilos y 300 gramos. Es el séptimo en la línea de sucesión tras su abuelo el príncipe Carlos, su tío, sus primos y su propio padre.
Su nombre también es una incógnita y se mantendrá en secreto hasta el posado de los duques con el bebé, dos días después de su nacimiento. Será el primer niño mestizo en la Casa Real Británica.
En Windsor se ha vivido como una auténtica fiesta y en un hospital de California han colocado coronas a los bebés recién nacidos. "Cada padre y madre dirá que su bebé es increíble, pero esta pequeña cosa es para morirse", ha dicho un tierno Harry.