Las ciudades francesas de París, Marsella, Lyon, Toulouse y Montpellier, en "alerta máxima" por la incidencia de nuevos casos positivos de coronavirus, serían las afectadas por el posible toque de queda.

En Bruselas la polémica está servida por el nuevo código de semáforo propuesto para tener un mapa único indicando la incidencia del virus en los diferentes países de la Unión Europea, algo que no ha gustado a las aerolíneas o agencias de viajes.

En Países Bajos se cierran bares y restaurantes, prohíben el deporte aficionado en grupo y se limitan a tres los invitados en casa por día. "Para controlar el virus debemos reducir drásticamente los contactos y los viajes", ha pedido el primer ministro holandés, Mark Rute.

Italia toma nuevas medidas al registrar el mayor número de contagios diarios desde marzo. "Creemos que con estos sacrificios y respetando estas medidas seremos capaces de afrontar esta nueva fase de la pandemia", ha dicho el primer ministro de Italia, Giuseppe Conte.