Según el Gobierno de Francia, si hubieran tardado media hora más en entrar, se hubiera perdido la catedral. En el centro, se puede observar el agujero donde se encontraba la aguja gótica que cayó a causa del incendio.

También han desaparecido las cuatro cubiertas que protegían alrededor del edificio la nave central del templo. Miles de personas se siguen concentrando en vigilias frente a la catedral.

El Gobierno coordina ya los trabajos de reconstrucción y la duda es si se deben emplear materiales más modernos y seguros. El proceso será largo y costoso y el presidente de la República, Emmanuel Macron, quiere realizar las obras "en cinco años".