En Yeumbeul, en Senegal, Gonzo ha escuchado qué opinión tienen de Europa y "piensan que es la buena vida, el Dorado, que vas a tener todo lo que quieras. Si ves que un amigo o familiar viene de Europa y empieza a invertir y tener una buena vida, esto te empuja a soñar y a preguntarte: ¿por qué yo no puedo aspirar a eso?".

Los sueños allí pueden ser los mismos que los de los europeos, pero "les faltan medios" y se preguntan por qué no tienen derecho a viajar. Les cuesta entender cómo pueden moverse y cruzar fronteras sin problema mientras a ellos les cuesta moverse dentro de África.

Malamine Soly emigró a España y se jugó la vida en ese viaje y ahora es cofundador de la Asociación Dunia Kato, desde donde ayuda a los que quieren emprender ese camino: "aquí tenemos muy pocas oportunidades. Yo estuve a punto de morir en el mar y he tenido una pistola en la cabeza".

Mariama Badji, secretaria General de la ONG África Feliz, ha explicado a Gonzo que estos jóvenes "siempre piensan en Europa, en viajar a España o Italia porque el éxito está allí y no es así". "Yo me di cuenta después de cuatro años que no tenía nada que hacer en España y que iba a ser más útil en Senegal", ha sentenciado.